Gestión del trabajo colaborativo a través de la investigación digital

Actualmente, el internet nos abre un sinfín de posibilidades, así como nuevas formas de aprendizaje y trabajo. Contamos con acceso a la información, a nuevos medios de conexión y comunicación y esto hace posible desarrollar complejos proyectos, sin la necesidad de que un par de personas, o grupo de trabajo, se encuentren ubicados en algún lugar físico en específico. Todo esto nos lleva a conocer el concepto de trabajo colaborativo.

El trabajo colaborativo es aquel que se lleva a cabo entre varios individuos que aportan sus ideas, formación y colaboran para enriquecer el trabajo que están desarrollando y conseguir resultados óptimos.

Cuando evolucionamos a trabajo colaborativo, debemos tener presente que es una elección basada en conductas altruistas, en establecer una buena comunicación entre las personas que participan, en determinar acuerdos fructíferos para el desarrollo de las labores, en tomar decisiones de manera conjunta, y en tener objetivos comunes.

Está Era de colaboración una organización solo puede ser verdaderamente competitiva conectando con la inteligencia colectiva de todas las personas que la integran, aprovechando al máximo las nuevas formas de hacer y los nuevos modelos de colaboración que nos ofrece la tecnología a través de la web social.

Por lo que es esencial fortalecer las competencias y habilidades de liderazgo en toda la organización y a su vez promover una cultura de confianza, lo cual es clave para generar interacciones productivas entre las personas y entre las organizaciones.

Básicamente las reglas del juego están cambiando, a pesar de que se veía venir, ahora es una realidad totalmente tangible. Tenemos el reto de desplegar nuevas capacidades; ya que con esta nueva realidad de interacción virtual uno de los elementos de mayor relevancia son las capacitaciones técnicas. Además, es en este momento donde se pone de manifiesto como los equipos de alto rendimiento y con un buen desarrollo personal de sus miembros son los más aptos y capacitados para gestionarse en esta nueva realidad que se nos presenta. Ahora más que nunca la capacidad de escucha, de conexión interpersonal, la empatía y el autoconocimiento son claves en las competencias blandas de los equipos.